En un trágico suceso que ha conmocionado a toda la comunidad, el cuerpo sin vida de la pequeña Laya Khalesi Llahua, de solo cuatro años, fue encontrado en un buzón de desagüe en el distrito de Izcuchaca, en Huancavelica, a pocos metros de donde se halló su sombrero días antes.
Cabe recordar que Laya había sido reportada como desaparecida el miércoles 15 de enero, mientras acompañaba a sus padres comerciantes en un viaje habitual por la zona.
“Queremos saber qué le pasó a nuestra niña. Necesitamos respuestas”, clamaban los familiares y amigos, desbordados por el dolor y la incertidumbre. La policía local acordonó la zona mientras esperan la llegada del Ministerio Público para proceder con el levantamiento del cadáver.
El día de su desaparición, mientras los padres de Laya atendían sus negocios, la pequeña se perdió, lo que dio inicio a una búsqueda urgente. Durante las labores de rescate, se hallaron manchas de sangre cerca del lugar donde se encontró el sombrero de Laya, lo que llevó a los investigadores a centrarse en buzones cercanos que aún no habían sido inspeccionados. Fue en uno de estos buzones donde se hizo el macabro hallazgo.
El descubrimiento de sangre en las rocas cercanas y la preocupante aparición de un niño menor de diez años en las grabaciones de seguridad aumentan la tensión. Este niño, con antecedentes de comportamiento agresivo y conflictos previos con otros menores, fue blanco de la ira de los habitantes, quienes apedrearon su casa.
La fiscalía actuó de inmediato, ordenando la apertura del pozo de desagüe basándose en la evidencia encontrada en la gorra de Laya, que contenía restos de desagüe vinculados al lugar de la desaparición.
La División de Investigación Criminal (Depincri) de Huancavelica es un cargo de la investigación.