Durante un campeonato de cuadrillas de la hermandad del Señor de los Milagros en Huaral, provincia de Lima, Perú, dos hermandades se vieron envueltas en un lamentable incidente que incluyó tanto a los jugadores como a los espectadores presentes en las tribunas.
La pelea estalló debido a una jugada polémica cerca del arco, lo que generó tensiones entre los equipos. Ante la violencia desatada, los árbitros decidieron retirarse, dejando a los espectadores sorprendidos por la situación. Lo que originalmente debería haber sido una noche de confraternidad y deporte se convirtió en un enfrentamiento a puño limpio, con patadas y jaloneo de cabello.
Los organizadores del evento optaron por descalificar a los equipos involucrados en la final, aunque reconocieron otras actuaciones destacadas. Hasta el momento, la hermandad del Señor de los Milagros no ha emitido una declaración sobre estos bochornosos incidentes que han ensombrecido la festividad religiosa.