La insólita llegada de 1.100 dosis de la vacuna rusa Sputnik V en un camión frigorífico avícola hasta un hospital en la región amazónica de Beni, en el noreste de Bolivia, generó críticas y polémica este martes 2 de enero.

Las dosis tuvieron que ser trasladadas desde el aeropuerto Jorge Heinrich hasta un hospital en Trinidad, la capital de Beni, en el camión de una distribuidora de pollos porque “hubo un desperfecto” en el vehículo dispuesto inicialmente por el Servicio Departamental de Salud (Sedes), explicó el vocero presidencial, Jorge Richter.

“Tuvieron que apelar de emergencia a una empresa que tiene camiones con cámaras de frío”, indicó.

El suceso, ocurrido en la víspera, fue muy comentado en redes sociales como Facebook y Twitter, donde se compartieron videos que muestran el paso del camión con escolta policial.

La parte delantera del vehículo llevaba una bandera boliviana y una wiphala, la ajedrezada y multicolor enseña de los pueblos indígenas, y a los costados se veía el logotipo de la empresa avícola.

Las reacciones en las redes fueron desde la indignación a la ironía, comparando el transporte de las vacunas con un servicio de reparto a domicilio, o haciendo mención a los vehículos que se usan en otros países para ello.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *